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ULANTHA GRANDIFLORA, LA ORQUÍDEA QUE VINCULÓ A CHILE CON SAN VICENTE Y LAS GRANADINAS,
CON SU ANTIGUO JARDÍN BOTÁNICO Y CON EL MOTÍN DEL BOUNTY

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Patricio Novoa


Investigador asociado del Jardín Botánico Nacional.

E-mail: pnovoa7@gmail

 

 

William Jackson Hooker (1830) publica Neottia grandiflora basado en un ejemplar de orquídea que fue enviado al jardín botánico de Glasgow por el reverendo Lansdown Guilding desde la isla St. Vincent & Grenadines y que floreció en dicho jardín en la primavera de 1829. L. Guilding fue un clérigo anglicano, historiador natural y artista de Kingstown, San Vicente, que fue nombrado capellán colonial de la isla. Sus intereses científicos eran principalmente zoológicos y es quizás más conocido por su descubrimiento y descripción del primer onicóforo (Peripatus) en 1826. Pero también recogió nuevas plantas vasculares y no vasculares locales y publicó artículos referentes a la botánica del Caribe. Escribió un relato del jardín botánico de San Vicente, que se decía era el más antiguo del hemisferio occidental pues había sido fundado en 1765 y que contenía un árbol de pan que provenía de la población original traída a la isla por el capitán Bligh (1793). Guilding murió a los 34 años poco después de que su libro fuera publicado mientras estaba de vacaciones en Bermuda. El género Guildingia Hook. de las Melastomataceae y muchas especies incluyendo Asplenium guildingii Jenm., Calliandra guildingii Benth. y Crematomia guildingiana Miers fueron nombrados en su honor (Plants.jstor.org., 2017).

Hooker ubicó con dudas esta notable orquídea en el género Neottia, sin embargo, en la misma publicación y al pie de la descripción de Oncidium altissimum (dibujo 2990) indica, en una suerte de fe de erratas, que el nombre dado a la especie del dibujo 2956, Neottia grandiflora, es en realidad el de un nuevo género que denomina Ulantha (flores crispadas).

 

Lindley (1840) mantiene a Ulantha en la tribu Neottiae aseverando que en este notable género (Ulantha) encontramos la misma tendencia a romper la superficie de los sépalos en papilas o en pelos glandulares como en Chloraea de la tribu Arethusae, pero no tiene afinidad evidente con ningún género de Arethusae; esto debido a que en la revisión de Lindley, el género Chloraea aún era parte de la tribu Arethusae.

 

Cincuenta y tres años más tarde, Rolfe (1893) propone la nueva combinación, Chlorae aulantha para la Ulantha grandiflora de Hooker; indicando que “es extraño que no se conozca nada más sobre esta notable planta que está contenida en la descripción original. Grisebach dice que probablemente no es indígena de la isla de San Vicente y Bentham & Hooker (Gen. Plantarum iii., p.611) basados en Lindley dicen tener la autoridad para aseverar que es una Chloraea, y que no es nativa de las Indias Occidentales”, Rolfe, sin embargo, no se pronuncia sobre el lugar de origen ni tampoco sobre su origen geográfico.

 

El basamento en Lindley que habrían tenido Bentham & Hooker (en Rolfe, 1893) para proponerla como Neottia grandiflora no se comprende claramente, salvo por la existencia de la publicación de Lindley sobre Chloraea en 1840, donde él resuelve cambiar la Chloraea bletioides  propuesta por el mismo (1827), a Chloraea ulanthoides, indicando (pág. 404) que el epíteto bletioides “es tan inadecuado que no puedo ahora entender que tuve en cuenta para dárselo a la planta, y por lo tanto lo cambio”. Las flores son más parecidas a la Ulantha de Hooker, cuando se secan a pesar que el mismo Lindley (1840) opina que Ulantha grandiflora pertenece a la tribu Neottiae, cuyos géneros son mayoritariamente de Java, Ceylan, Nepal, Indias Orientales y solo algunas de Brasil, Jamaica, Perú (Baskervilla, Physurus).

 

Kraenzlin (1904) en su revisión de las Orchidaceae de Chile duda que el origen de Chloraea ulantha sea la isla de St. Vincent y la ubica en la sección I-Lamellatae del género Chloraea. La ilustración, tomada de Hooker (1830), es la más conspicua de las orquídeas chilenas que muestra en su trabajo (Figura 1). 

 

Reiche (1910) también ubica Chloraea ulantha en Lamellatae, pero con dudas: planta enteramente problemática para Chile. Kraenzlin refiere, que la planta floreció en el jardín botánico de St. Vincent y hasta en Inglaterra; pero duda que se admita como patria la isla de St. Vincent e indica que no podrá referirse a la isla británica de este nombre, situada en la India occidental, puesto que en la América tropical no se conoce ninguna especie de Chloraea, ni ningún viajero la encontró allá. Hallándose el centro del área geográfica de este género en Chile, con cierta razón de ahí se creerá indígena nuestra especie. Una localidad denominada San Vicente se halla cerca de Talcahuano, pero de allá no se trajo tampoco jamás tal orquídea. ¿Acaso se tratará de una variación brusca (Sprungvarietat) de C. ulanthoides? o una forma híbrida de C. ulanthoides × Bipinnula mystacina?”

Correa (1969) considera a Chloraea ulantha Rolfe como un sinónimo de Chloraea bletioides sin ofrecer antecedentes que justifiquen dicha sinonimia; a juicio de este autor,  quizás tuvo en cuenta su pertenencia a la sección Lamellatae de Kraenzlin y Reiche donde la ubicaron como hermana de C. bletioides, o tomó en cuenta la morfología del labelo que recuerda remotamente al de C. bletioides.  

 

Zuloaga et al. (1999 en adelante) en su Catálogo de Plantas Vasculares de la Flora del Cono Sur mantienen la propuesta de M. Correa.

Si se busca una explicación satisfactoria para este rompecabezas, hay que empezar por escribir que no existe ningún antecedente que vincule a Lansdown Guilding, con América del Sur. Existe, sin embargo, un vínculo con el Pacífico Sur  explicado por el segundo viaje del vicealmirante Bligh a Tahiti para buscar el árbol del pan, cuya notable historia no se puede soslayar. El vicealmirante William Bligh fue un oficial de la Marina Real Británica y administrador colonial. Durante su mando del HMS Bounty en 1789, ocurrió un famoso motín y Bligh y sus hombres leales debieron realizar un extraordinario viaje a Timor, después de ser dejados a la deriva en un bote por los amotinados. Dos años antes, en 1787 Bligh había tomado el mando del HMS Bounty para intentar ganar un premio ofrecido por la Royal Society of Arts. Navegó por primera vez a Tahití en abril de 1789 para conseguir semillas del árbol del pan, y luego fijar rumbo a la isla de St. Vincent, en cuyo jardín botánico se quería experimentar con su fruto para ver si podría ser un producto alimentario eficaz para alimentar a los esclavos. El HMS Bounty nunca regresó al mar Caribe, ya que estalló un motín a bordo a poco zarpar de Tahití. La disciplina entre los hombres se había deteriorado tras los cinco meses de descanso pasados en Tahití, periodo en el que muchos marineros vivieron en tierra y entablaron relaciones con mujeres nativas. La relación de Bligh con su tripulación fue empeorando a medida que imponía castigos cada vez más severos y aumentaba sus críticas y abusos teniendo a Christian como blanco frecuente, éste terminó por organizar con éxito un motín contra el capitán unas tres semanas después de que el navío hubiera dejado Tahití. Los amotinados proporcionaron a Bligh y a los dieciocho tripulantes leales un bote de 23 pies (7 m) tan cargado que la borda sólo estaba unos pocos centímetros por encima del agua, con cuatro sables, alimentos y agua para unos días, un sextante y un cronómetro, pero ningún mapa ni una brújula. Timor era el puesto europeo más cercano. Bligh y su tripulación pusieron rumbo a la isla de Tofua en primer lugar, para obtener suministros. Allí fueron atacados por los nativos hostiles y uno de los tripulantes murió. Después de huir de Tofua, Bligh no se atrevió a recalar en las siguientes islas (Fiji), ya que no tenían armas para defenderse y esperaban recepciones aún más hostiles. Bligh consiguió llegar a Timor después de un viaje de 47 días y 6700 km de navegación con la única baja del hombre muerto en Tofua. Los amotinados viajaron a la isla Pitcairn, un islote perdido en la mitad del océano entre Tahiti y la isla de Pascua, mientras que Bligh conseguía llegar a Timor y comenzar un proceso para que los amotinados comparecieran ante la justicia. Bligh logró regresar a Gran Bretaña en abril de 1790, y el Almirantazgo británico envió a la HMS Pandora para capturar a los amotinados. Catorce amotinados fueron apresados en Tahití y llevados a las celdas del navío, que entonces procedió a buscar, sin éxito, a Christian y al resto de los hombres que se habían escondido en la isla Pitcairn. La Pandora encalló en la Gran Barrera de Coral en el camino de vuelta, perdiendo a 31 tripulantes y cuatro prisioneros del Bounty. Los diez restantes llegaron a Gran Bretaña en junio de 1792 y fueron juzgados en un consejo de guerra; cuatro fueron absueltos, tres indultados y tres ahorcados.

El grupo de Christian permaneció sin ser descubierto hasta 1808, fecha en que solo uno de los amotinados, John Adams, seguía vivo. Casi todos los demás hombres, incluido Christian, se habían matado entre ellos o habían muerto a manos de los rehenes polinesios. No se tomó ninguna acción contra Adams. Los descendientes de los amotinados con sus consortes tahitianas viven hasta hoy en las islas Pitcairn. La percepción que acabó calando en el imaginario popular fue la de Bligh como un tirano y Christian como una víctima trágica de las circunstancias, percepción registrada en cinco películas y un libro de Julio Verne sobre los eventos. Años más tarde el vicealmirante Bligh, al mando del HMS Assistance, emprendió de nuevo el viaje para llevar el fruto del árbol del pan desde Tahití hasta la isla de St. Vincent. La operación fue un éxito y aún hoy día el fruto del pan es un alimento popular en las Indias Occidentales. Durante este viaje de Bligh también se recolectaron muestras de una fruta de Jamaica, el aki, presentándola en la Royal Society en Gran Bretaña a su regreso (extractado de Es.wikipedia.org, 2017).

Finalmente, la lucha de Christian contra Bligh ha venido a representar la rebelión contra el autoritarismo, una metáfora de la vida en libertad contra la vida restringida de la sociedad actual.

Volviendo a Ulantha, la abundante cosecha de árbol del pan hecha por Bligh en su segundo viaje, fue entregada al Rev. Guilding, director del jardín botánico de St. Vincent para su aclimatación. Las notas de dicho viaje, escritas por el Rev. Guilding (An Account of the Botanic Garden in the Island of St. Vincent. 1825) indican que el capitán Bligh, colectó otros tipos de plantas comestibles y varias rarezas botánicas; en consecuencia es posible afirmar que esta orquídea sea en realidad alguna de las llevadas desde Polinesia por Bligh o incluso de Timor, al este de Java, donde Bligh estuvo refugiado luego del amotinamiento.

De acuerdo con los antecedentes que se presentan la opinión del autor es que  Ulantha grandiflora (y su sinónimo Chloraea ulantha) debe ser considerada como una especie de origen incierto, perteneciente a la tribu Neottieae, con origen probable en el Pacífico sur o en el archipiélago de Malasia. Además, su inclusión en el género Chloraea, oriundo del sur de Sudamérica y, más aún, su sinonimia con Chloraea  bletioides (Correa, 1969) no tiene sustento morfológico, ni histórico. Por cierto si las pruebas no apoyan decididamente la hipótesis propuesta, entonces se aceptará la alternativa que la especie sea efectivamente una Chloraea y que su existencia en el jardín botánico de la isla St. Vincent se explica por los numerosos viajes de botánicos europeos que llevaron plantas de Chile a Europa en el siglo XVIII; el paso por dicho jardín pudo haber sido una escala común por la posición estratégica de dicha isla en el viaje de vuelta a Europa.

 

Quizás un desafío romántico para los tiempos actuales sea repetir el viaje que hizo el vicealmirante Bligh para navegar en busca de árbol del pan, pero esta vez para encontrar esta bizarra y enigmática orquídea cuyo origen obsesionó a los botánicos naturalistas del siglo XVIII y que jamás fue encontrada nuevamente en la naturaleza.

 

AGRADECIMIENTOS

Se agradece a Sergio Elórtegui la revisión historiográfica del escrito.
 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

 

Correa, M. 1969. Chloraea género sudamericano de Orchidaceae. Darwiniana, tomo 15, N° 3-4 págs. 374-500.

Es.wikipedia.org. (2017). William Bligh. [online] Available at: https://es.wikipedia.org/wiki/William_Bligh [Accessed 14 Jul. 2017].

Es.wikipedia.org. (2017). HMS Bounty. [online] Available at: https://es.wikipedia.org/wiki/HMS_Bounty [Accessed 14 Jul. 2017].

Hooker, W. J. 1830. Botanical Magazine v.57, 2:v.4. 2956.

Plants.jstor.org. (2017). Guilding, Lansdown (1797-1831) on JSTOR. [online] Available at: http://plants.jstor.org/stable/10.5555/al.ap.person.bm000003258 [Accessed 14 Jul. 2017].

Kraenzlin, F. 1904. Orchidacearum. Genera et Species. Exposuit. Berlin. Mayer & Müller.140 pp.

Lindley, J. 1827. Remarks upon the orchideous plants of Chile. Quart. J. Sci. Lit. Arts 22: 43-53. 1827.

Lindley, J. 1840. The Genera and Species of Orchidaceous Plants 404.

Reiche, K. 1910. Orchidaceae Chilenses: ensayo de una monografía de las orquídeas de Chile (No. 18). Imprenta, Litografia i Encuadernacion Barcelona. 85 p.

Rolfe, R. A. 1893. Bulletin of Miscellaneous Information, Royal Gardens, Kew 278. 1893

Zuloaga, F. O. & O. Morrone. 1999. Catálogo de las Plantas Vasculares de la República Argentina. II. Fabaceae-Zygophyllaceae (Dicotyledoneae). Monogr. Syst. Bot. Missouri Bot. Gard. 74.


Citar esta nota como:

Novoa, P. 2017. Ulantha grandiflora, la orquídea que vinculó a Chile con San Vicente y las Granadinas, con su antiguo jardín botánico y con el motín del  Bounty. Chloris Chilensis Año 20 N° 1. URL: // www.chlorischile.cl


 

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